Cerca de la prestigiosa Plaza Malá Strana, se encuentra el Malostranska Residence, un lujoso establecimiento que se erige justo en frente de la Iglesia de San Nicolás.

Todos los apartamentos de este hotel tienen vistas al Puente de Carlos y el mítico Castillo de Praga. Las habitaciones han sido decoradas de un modo personalizado, y aunque algunas ostentan mayor cantidad de muebles antiguos, una buena parte tiene una decoración más moderna y un mobiliario más actual, aunque la decoración se mantiene dentro de un contexto elegante.

Hay apartamentos que tienen habitaciones con cuna para bebé. Los muebles son grandes y aunque para algunos esto de que los muebles sean grandes nos signifique ver algo muy aparatoso, lo cierto es que cuando se cuenta con ese tipo de mobiliario, el nivel de confort es máximo, porque los cojines son modernos, y lo único antiguo que se conserva, es el armazón de madera.

Los cuartos de baño son amplios y modernos, dentro de ellos predominan los colores claros. Todos los apartamentos tienen internet inalámbrico y cocina. En la planta baja del hotel, está el restaurante Sole Mío, donde se sirve un abundante desayuno caliente. Los visitantes también pueden visitar los restaurantes asociados que quedan a pocos metros del hotel, al igual que hay algunos club de jazz y bar de blues.

Enfrente del establecimiento hay una parada de tranvía, mientras que la estación de metro más cercana está a pocos minutos caminando. También hay trenes cercanos.

Para moverse por la ciudad, el hotel tiene en alquiler, coches y ciclomotores, además de limusina, para los de gustos más refinados.

Vía/ Hotels-world