Con el paso de los años, se han ido desarrollando diferentes tipos de turismo alrededor del mundo. Uno de ellos, es el llamado turismo siniestro, que se enfoca en los buscadores de historias trágicas y horrorosas. República Checa tiene de esas historias al por mayor.
El turismo debe ser la única industria que permanece inalterada en su crecimiento, pese a la crisis económica, porque desde el 2011 hasta ahora, el número de turistas crece y es cada vez más exigente. Las exigencias van desde la calidad y cantidad de los servicios, hasta el tipo de vivencias y sensaciones que los viajeros quieren experimentar.
República Checa, es un lugar idóneo para el turismo siniestro, por todas sus historias y reliquias históricas. Además, hay cosas muy interesantes para descubrir, como por ejemplo, eso que se dice que Albert Einstein descubrió allí la teoría de la relatividad. Conocer misterios como éste, es tan atractivo como conocer temas oscuros, como asesinatos, siniestros naturales, guerras y cazas de brujas.
¿Algunos sitios perfectos para satisfacer la curiosidad siniestra?. Por ejemplo, está el Campo de Concentración de Terezín, el pueblo de Lidice, el Monumento a la batalla de Austerlitz o el osario de Kutná Hora.
Dado lo sensible de los sucesos que ocurrieron en esos lugares, las campañas de promoción no podrían de ningún modo, decir que visitar un campo de concentración será lo más maravilloso de la vida.
Los viajeros que buscan esos lugares siniestros, lejos de ser personas morbosas, son personas muy interesadas en conocer la historia, los monumentos y vestigios que quedaron en el lugar. Muchos son estudiantes de historia que intentan vivenciar de un modo más profundo lo que leen en los libros. Hacer campañas de promoción para atraer a los estudiantes es una buena idea por estos tiempos, en los que se ha hecho más asequible viajar para vivir la historia de un lugar.
Una campaña dirigida a gente joven iría muy bien en este país, considerando que la mayoría de los viajeros que llegan tienen menos de 44 años. Los que más viajan a República Checa son los alemanes, seguidos por los rusos y los polacos, aunque en los últimos años, aumenta el número de visitas de países más lejanos, como México y Brasil. Los latinoamericanos viajan interesados en conocer la historia del Niño Jesús de Praga, que es muy popular en España también.
Este año 2013, el lema de la campaña promocional del país será “República Checa, país de historias”. Así que ya saben, no sólo hay cerveza en este país.
Foto/ Flickr (Elpadawan)