La pequeña ciudad de Susice, se encuentra ubicada en el pintoresco valle del río Otava, al pie de la montaña Svatobor. Por el centro de la ciudad vieja, hoy se pueden ver varios edificios históricos restaurados, todos muy recomendables para visitar.
Algunos de los edificios restaurados de los que les hablo, son el Ayuntamiento Renacentista y la Iglesia de San Wenceslao, con data original de 1322, es decir, muchos siglos de historia. Hay también un interesante cementerio judío que data del siglo XVII.
Por esta zona, cuando la industria de la extracción de oro decayó, dio pie al inicio de una nueva industria en pleno siglo XIX, la fabricación de fósforos de seguridad. En el Museo Sumavy, pueden encontrar una exposición permanente acerca del proceso de fabricación de estos fósforos. Allí, hay una colección única y magnífica de cerillas. Este museo está ubicado en la impresionante casa Voprchovsky, en la Plaza Principal.
Susice es un perfecto punto de partida para hacer varias excursiones. Un recorrido popular, es la caminata que lleva a la cima de la montaña Svatobor. La ruta marcada en rojo, de 3,5 kilómetros, es empinada y enervante, así que no es recomendable para las personas que sufran vértigo.Otra colina que está cerca y ofrece hermosas vistas sobre el valle es el Straz.
La parte superior de la Capilla del Ángel de la Guarda, fue construida en 1683, y a esta capilla pueden llegar utilizando una escalera encantadora a la que se puede acceder desde Alsova, una calle lateral del Palackeho Ulice.
También es interesante pasear a lo largo del río Otava, que es actualmente todo un atractivo turístico navegable, del que ya hablaremos. Aunque si tienen un día completo disponible para recorrer, no se pueden perder una visita al Castillo Kasperk.