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Hace tan sólo unas pocas décadas atrás, la bicicleta era considerada nada más un medio de transporte que serviría para llegar a otro lugar. Pero con el pasar del tiempo, a alguien se le ocurrió que las bicicletas podían utilizarse para pasar momentos de placer. Además, pasear en bicicleta es la mejor manera de ahorrar, y tener unas vacaciones baratas, en ciudades como por ejemplo, Praga.

Hace tan sólo unos años atrás, aparecieron en República Checa, unos 37.000 kilómetros de pistas para las bicicletas. Desde entonces, el país tiene las mejores condiciones para andar en bicicleta, dado sus paisajes hermosos y monumentos históricos, que se pueden visitar.

Como la bicicleta tiene un rol principal en las rutas activas que se han ido creando en el país, es fácil también, encontrar guías y mapas con muchas rutas, y muchos hoteles y lugares para alquilar las bicicletas.

Las pistas de bicicleta de la República Checa, son fáciles de reconocer, porque hay una señaletica en azul y blanco que las indica.

Hay rutas en bicicleta que atraviesan los Parques Nacionales, como el Parque Nacional Sumava. Otras rutas muy interesantes para conocer y recorrer arriba de dos ruedas, son las Rutas del Vino de Moravia. Estas rutas del vino, tienen la colaboración de cientos de municipios más otros socios.

Como las rutas vitivinícolas están conectadas entre sí por una ruta arterial, se puede conocer varias localidades, y organizar excursiones por un solo día o más. Finalmente hay que ir con la idea bien definida, de si se quiere conocer sólo algo de la cultura local, o profundizar en los vinos y monumentos.

La red de senderos Praha-Wien Vías Verdes es una red de senderos para bicicletas y senderismo, que va entre Praga y Viena. Este macro sendero es de 470 kms. De largo y recorre ciudades históricas y pueblos románticos, que tienen hermosos castillos y palacios o conventos. Los senderos pasan por estanques y pantanos en el Sur de Bohemia y por los viñedos de Moravia del Sur.

Vía/ Cyclostrategy, Foto/ Flickr (Freshphoto)

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