La Casa Danzante, o The Dancing House, es una edificación muy extraña, obra de Vlado Milunic y Frank O. Gehry, quienes lo crearon durante el año 1996. Si se fijan bien, este edificio desde cualquier perspectiva es como si estuviera bailando. Todo es a causa de sus curvas en la parte inferior, central y superior.
Originalmente, esta casa se llamó “Fred y Ginger”, la casa se destaca entre las edificaciones de estilos neo barroco, neo gótico y los Art Nouveau de Praga, porque es famosa. Sin embargo, lleva el sobrenombre de “Drunk House”.
El sitio de esta casa fue originalmente ocupado por una casa de estilo neo renacentista del siglo XIX. Esta casa fue destruida durante los bombardeos del 1945, y sus restos fueron retirados totalmente en 1960.La casa vecina, que se ve con un pequeño globo en su techo, fue co-propiedad del ex presidente checo Vaclav-Havel, quien vivió allí desde su infancia y hasta mediados de la década de 1990. Él fue quien ordeno el estudio de arquitectura de Vlado Milunic, quien participo en la reconstrucción de apartamento Havel´s al lado de esta casa. Posteriormente, el banco neerlandés ING acordó construir una casa y pidió a Milunic invitar a un arquitecto de clase mundial.
Milunic pregunto a Jean Nouvel, quien rechazó la invitación debido al poco espacio del terreno (491 metros cuadrados), entonces él le pregunto a Frank Gehry y este aceptó el reto. Gehry dispuso de un presupuesto casi ilimitado, ya que ING quería crear un ícono para Praga. La construcción comenzó en 1994 y la casa se terminó en 1996.
Este edificio es un ejemplo de la arquitectura moderna deconstructivista, con una inusual forma. Su forma refleja a un hombre y a una mujer (Ginger Rogers y Fred Astair) bailando juntos. La construcción contempla 99 paneles de hormigón, cada uno de diferente forma y dimensión. Cada uno fue una pieza única.
Su inusual forma y soluciones técnicas provocaron un gran debate público. Hoy, más de diez años después las emociones confluyen hacia el orgullo de una Praga moderna. El 2005, el Banco Nacional Checo emitió una moneda de oro en honor a esta casa, conmemorando el lema “10 siglos de arquitectura”.
La casa está situada en la esquina de la Nabrezi Rassinovo y la calle Resslova, a poca distancia del metro Karlovo Namesti.
La casa se utiliza como edificio de oficinas y no está abierto al público, sin embargo, se puede visitar el restaurante La perle de Prague, ubicado en la séptima planta, con una hermosa vista del rio y una vista panorámica del Castillo de Praga.
Vía: galinsky