Una de las cuestiones más tradicionales de la República Checa son sus bebidas, y entre todas ellas destacan, como en varias partes del mundo, las que convienen cierto grado de alcohol. En este caso, una de las consideradas como patrimonio del país por sus habitantes es la llamada “Becherovka”, una infusión realizada en base a 32 hierbas y raíces de sabor ligeramente amargo, fabricado en la ciudad norteña de Bohemia.

Lo más interesante de la tradición de esta bebida probablemente sea que se lleva produciendo más de dos siglos, ya que el continuando de expendio comenzó en 1807 cuando Josef Becher, farmacéutico de esta villa, bajo estrictas recetas aún secretas, realizó los primeros experimentos de remedios, que como en el caso de la Coca Cola, terminaron por transformarse en una bebida apta para todo el público, mayor de edad claro.

Hay que destacara además que este licor tiene un grado alcohólico del 38%, y que suele consumirse frío según la costumbre, siendo la base de la preparación de una gran cantidad de cócteles, ya que casi nunca se toma sólo. Una de las mezclas más conocidas que lo tienen como protagonista es la denominada “Beton”, que incluye agua tónica y cuyo nombre deriva de ambas bebidas.

Además, las botellas chatas son características de esta bebida y hoy en día son de color verde para proteger mejor el licor de la luz. Para los turistas, la mismas puede ser obtenida en cualquier supermercado o tienda, además claro de en los mejores pubs y bares de República Checa.

Vía: Viaje a Praga
Imagen: Party Professor