La Calle de Oro con sus pintorescas casas del siglo XVI, es una de las principales atracciones turísticas junto al Castillo de Praga, sede presidencial.
Es por la importancia histórica y turística de esta calle, que los expertos de los estudios cinematográficos de Barrandov en Praga, están haciendo replicas de muebles de época y otras decoraciones interiores de las casitas en el carril de Oro en el Castillo de Praga, que se abrirá en junio, luego de un periodo de reconstrucción de un año.
El carril tuvo que ser reparado principalmente en su alcantarillado, que estaba ya obsoleto y amenazaba los cimientos de la casa.
Apenas terminen los trabajos de reconstrucción, se instalará una exposición histórica que dará vida a las casas de entre los siglos XVI y XX instaladas en la Calle de Oro.
Otros trabajos que están haciendo los de los estudios Barrandov, son muebles de época, adornos y herramientas, que se mostraran en las casas de esta calle. Hay una leyenda que dice que los alquimistas vivieron en la Calle de Oro, y que en ellas vivían los guardias de los castillos, los funcionarios y quizás hasta algunos orfebres. En una de estas casas incluso vivió el escritor judío Franz Kafka.
Entre los escenarios reconstruidos, se puede ver un taller de orfebrería para ancianos, un bar del Renacimiento, el hogar de la famosa vidente y adivina Magdalena Prusova, apodada “la señora de Tebas”, que vivía en la casa N°14 desde 1918 hasta finales de la Segunda Guerra Mundial.
Los artesanos de los estudios Barrandov deben aplicar métodos muy sofisticados para hacer los muebles y otros artículos finos, que deben parecer auténticos. Incluso la pintura interior debe ser aprobada por los protectores de patrimonio y estas deben ser aplicadas por expertos en patinado, de modo que el resultado sean unas paredes de decenas de años atrás.
Entre los artículos recreados, hay una vieja mesa del Renacimiento, una cocina de estilo barroco, y un taller de orfebrería de la época del barroco tardío. Entre medio hay un escritorio original que ya tiene unos 200 años.
Aparte de la exposición histórica, habrá una mampara de cristal con tiendas de recuerdos que serán arrendadas a los postulantes seleccionados. En estas tiendas se ofrecerá productos tradicionales artesanales checos.
En total, la reconstrucción de la Calle de Oro ha tenido un costo de unas 34 millones de coronas, según la Administración del Castillo de Praga.
Vía/ Praguemonitor
, Foto/ (Vlastula) flickr